“Cutting”: síntoma contemporáneo en adolescentes

Uno de los síntomas que aparecen en la actualidad con gran preocupación de los adultos, como se recibe en consultas por adolescentes, es el llamado “cutting”: consiste en autoinflingirse cortes en el cuerpo. Tajearse, hacerse marcas, sobre todo en extremidades.

No se trata de causarse dolor, si no paradógicamente todo lo contrario: es tal el dolor afectivo, la angustia, el estado de desamparo; que dicha práctica provoca, a la manera de una compulsión, según el decir de los pacientes: cierto alivio, acotado a una parte del cuerpo.

Por supuesto que estamos hablando de cuestiones inconscientes y con un gran padecimiento subjetivo. Un grito desesperado de ayuda, sin poder acudir a un Otro que aloje, de otra manera, pero que sin embargo, se da a ver. Habrá que pasar a escuchar de qué se trata en cada caso. Qué quiere decir cada sujeto con eso en lo que se muestra.

No pasa por la palabra, ni por el llanto de la angustia, pasa directamente por el cuerpo, en tiempos de imagen, el corte aparece en lo real, más encarnado que nunca.

Nos habla de una fragilidad simbólica, de carencia de amor y deseo importantes, que según los matices que tome en cada caso, los hay quienes se exceden por falta de medida sin medir consecuencias. Hay además en esa etapa de la vida grupos de identificación, con lo cual se complejiza la cuestión.

Puede asociarse a otros síntomas como bulimia y anorexia, en una edad donde se pasa de ser niño-niña a la segunda identificación sexual, hombre, mujer, con todas las complicaciones que eso implica en algunos casos.

Qué hacer ante esto? Para los analistas de ninguna manera serviría prohibir un acting como lo llamamos en Psicoanálisis, ni tampoco interpretarlo, sino hacer una maniobra analítica de manera que eso pase al discurso, en transferencia.

Sucede que las chicas y chicos se los confiesan a amigos, o son descubiertos por actitudes, o porque en algún momento no se puede tapar más, y los amigos no saben qué hacer, como ayudar. Es el momento de poder contar con algún adulto que tome esto de una manera seria y responsable, requiere de una consulta y nunca un reto, ya que quien padece de este síntoma no responde a una voluntad consciente y está sufriendo.

Es una manera de inscribir el sufrimiento agujereando el propio cuerpo, para soportar el dolor de existir.

Se trata, para el Psicoanálisis, de registrar el dolor que esté en juego en cada singularidad, apostando a la vida.

Violeta Paolini. Miembro de la Escuela de Orientación Lacaniana y de la Asociación Mundial de Psicoanálisis.