ESPECIAL PARA DIARIO ANDINO
“La palabra como mediador y como lo opuesto a la violencia"
“Lo que puede producirse en una relación interhumana es la violencia o la palabra”
Lacan, 1958.
Si decimos que la violencia es la ruptura del lazo social, el Psicoanálisis es una práctica que introduce los afectos a un discurso.
Fuera de todo dominio, la pulsión, lejos de poder ser educada, controlada, aparece en la época donde el Otro desfallece, no “media”, y los dispositivos institucionales y de control hacen agua.
Cómo intervenir desde el Psicoanálisis allí donde el rechazo al amor, a lo femenino en tanto incontrolable, imposibilitan a hombres y mujeres establecer una relación digna con el otro?
Es ubicando a cada uno en su dimensión de responsabilidad en su posición en la vida que apuntamos a habilitar un lugar cuidado, y cuidadoso con el semejante, incluyendo aún sus diferencias, lo cual termina en caso contrario en segregación, llegando incluso a veces hasta la muerte.
Hoy asistimos a una especie de epidemialización de las violencias: en las calles, escuelas, ciudades, en el mundo. Un sin límite a la pulsión de muerte, y sin sentido en muchos casos.
Así es cuando prevalece el goce en lugar del Ideal, y los lazos en la comunidad no se basan en la identificación al padre por vía del Ideal.
Se tratará de construir nuevos referentes que alojen a los sujetos a un entramado social que permita regular lo que desborda sin imponer un orden superyoico o caprichoso, si no articulando la ley al deseo, apuntando a la vida.
Violeta Paolini. Miembro de la Escuela de Orientación Lacaniana y de la Asociación Mundial de Psicoanálisis.