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Cuando los mapuches echaron a los Jones Huala de La Angostura

Estuvieron entre 2009 y 2011, tensos años de ocupaciones y desalojos. Llegaron para ayudar a resistirlos, pero los Paicil Antriao no los quisieron más entre ellos. Aquí explican por qué.
27/12/2017
Cuando los mapuches echaron a los Jones Huala de La Angostura

Por Mariana Fernández

"Ni argentinos ni chilenos, somos Nación Mapuche. Todo el territorio libre y recuperado”. La frase es casi una muletilla en el universo discursivo del grupo autodenominado Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).   Con ese ley motiv, se  conformó la supuesta “organización” mapuche  dedicada a recuperar tierras “ancestrales”y resistir todo intento de desalojo por medio de la “autodefensa”

Los primeros registros del grupo  en la región se remontan a un comunicado del 2008, pero el accionar concreto en Villa La Angostura data de mediados de 2009. La RAM tiene vínculos y se inspira  en la  Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), creada en 1998 que reivindica la autonomía del pueblo mapuche y declaró la guerra al estado chileno.

La versión “argentina” , minúscula en cuanto a la cantidad de integrantes,  entre el 2009 y 20011se adjudicó numerosos incendios intencionales en la zona del Belvedere, el sector que desde el 2005 reclama la comunidad mapuche Paichil Antriao y que ha sido escenario de enfrentamientos, ocupaciones y desalojos.

Hasta el día de hoy el problema de tierras continúa, pero sin duda ese fue el período de mayor violencia que se recuerde.

Provenientes de Bariloche, Facundo Jones Huala y  otros tres jóvenes desembarcaron en la localidad cuando el desalojo de  la comunidad Paichil Antriao era inminente y estaba en plena resistencia.  La Comunidad local pidió ayuda a las comunidades de la zona y así llegó Jones Huala a Villa La Angostura, por “solidaridad”.

Al principio la comunidad Paichil Antriao y su lonko,  Ernesto Antriao,  agradecieron el apoyo y los acobijaron. Pero cuando el nivel de violencia creció y vieron que la intención era traer más gente de Bariloche para ocupar tierras, tanto la comunidad como la Confederación Mapuche Neuquina tomaron distancia.

El grupo firmaba por momentos como “Resistencia Ancestral Mapuche de comunidades autónomas y conflicto”, más adelante también como Comunidad Paichil Autónoma, una denominación por la cual buscaron diferenciarse de la otra comunidad vigente.

Se adjudicaron un atentado, pero nadie les creyó

 Entre el abanico de hechos, la RAM se adjudicó el incendio de la Municipalidad a mediados del 2009. Sin embargo, curiosamente,  ni en aquel momento ni ahora las autoridades y la Justicia creyeron que habían sido ellos.

“Hubieron varios incendios que se adjudicaron. Jones Huala estuvo  en la toma de una hostería en construcción, pero del incendio de la Municipalidad no manejamos información de que hubieran sido ellos. Cuando hicimos la pericia de Bomberos y la aseguradora surgió que el incendio había sido provocado por un cortocircuito”, recordó David Tressens Ripoll, ex secretario de Seguridad del Municipio en aquella época. 

Consultado sobre si hubo temor ante la escalada de violencia, Tressens apuntó que “temor no teníamos, sabíamos que era gente que venía de otros lugares para usurpar. Era solamente un grupo de gente que se aprovechaba del concepto de comunidad abierta que tenía la comunidad Paichil Antriao,  nunca fue considerado como un movimiento  importante”

“Nos decían que teníamos que tirar las molotov a los policías ”

Juan Ramón Castillo vivía con su familia en una de las tres precarias casas que la justicia desalojó en el lote del norteamericano William Fisher, a fines del 2009.  Oriundo de San Martín, llegó a la localidad hace 15 años y desde hace 12 es miembro de la comunidad Paichil Antriao. Recuerda con lujo de detalles cómo se sucedieron los acontecimiento de aquella época.

“Jones Huala llegó en un momento cuando estábamos en lo de Fisher, que se corría el rumor del desalojo,  algunos miembros de la comunidad de Bariloche acudieron para ayudarnos a resguardar el lugar,  era una familia de Bariloche que venía a ayudarnos. Así llegan ellos a la comunidad, los dos Jones Huala”,  relata Castillo.

El hombre asegura que  principalmente los Jones Hualalos asesoraban: “nos decían que no tuviéramos miedo, que había que estar preparados y enfrentar las fuerzas especiales. Prepararnos con bombas molotov, gomeras de revoleo. Demostraban una actitud muy violenta, su manera de ser, armaban una molotov, y decía que había  que tirárselo a los cuerpos de los policías, como queriendo que se prendieran fuego”.

Cuenta que el pequeño grupo de jóvenes  no dormía a la noche, sino que se dedicaba a recorrer la montaña y dormía en el día.

 “Nos llamaba la atención porque Facundo caminaba toda la noche descalzo y se encargaba de asustar al casero de Fisher. Iba a pata por el monte. Era un tipo muy raro, hablabas con él y era muy buena persona, pero a la hora de enfrentar no le importaba derramar sangre”, agrega.

El quiebre con la comunidad Paichil Antriao comienza con la escalada de violencia y cuando traen  gente de Bariloche  para instalarse en parte de las tierras en conflicto.  En ese momento, relata Castillo, “la comunidad empezó a desconfiar”.

Según el vecino, el grupo de Huala armó casitas precarias en el terreno de una familia antigua pobladora de la localidad, en una cortada que solían utilizar todos, y “amedrentaban a la gente de la comunidad”.

Empezaron a hacer violencia hacia adentro, quemaron la casa de una familia de la comunidad y quisieron culpar a la misma comunidad, estaban generando un conflicto, querían separarnos  y acarrear para su rebaño”, sostiene Castillo.

En comunicados de esa época, el grupo manifestaba  sus diferencias con la dirigencia mapuche local como con la Confederación  Mapuche Neuquina, a quienes señaló como “traidores” y funcionales al “Estado represor”. 

Vía libre a la policía para sacar a Jones Huala

El hombre recuerda que en un  Trabún (reunión o encuentro de la comunidad mapuche) se tomó la decisión de sacarlos. “El lonko habló con el comisario y se le dijo que la comunidad dejaba el camino libre para sacarlos, que la comunidad no iba a defender a los Huala si la policía los iba a detener”.

En declaraciones a “Río Negro”, el mismo Lonko había salido a cuestionar y desvincularse del violento grupo.

En ese contexto, un día Jones Huala fue  detenido cuando  intentaba amenazar al casero del lote de Fisher.

“Empezó a tener miedo porque la policía se le estaba viniendo encima. El lonko le dijo, se van por las buenas o por las malas. Le dijo a la madre de Jones Huala, te lo vas a tener que llevar porque la policía te lo va a terminar matando. Y se fueron”, detalla Castillo.

Luego las visitas de Jones Huala fueron esporádicas, cada 15 días. “Ellos tenían y tienen amigos dentro de la comunidad”, asegura, y apunta que hace poco, uno de los involucrados en la toma de las tierras en el lago Mascardi estuvo en la comunidad buscando yuyos para remedios. “Pero la misma comunidad los hecho, no son personas gratas”, sentenció Castillo.

Amandina Gutierrez, ex Inan lonko de la Comunidad Paichil Antriao , fue testigo de algunos enfrenamientos en los que participó Jones Huala.

Cuando  Huala fue detenido en Chile en el marco de una causa por Homicidio (2013), en aquella oportunidad la inan lonko contó a “Río Negro”: “Nosotros no tenemos vinculación, ellos se denominan autónomos, son mapuches rurales, no tienen territorio. Estuvieron acá pero la comunidad los rechazó por la forma de lucha que tienen. No responden a ninguna organización, ellos actúan por si mismos, por eso se llaman independientes”.

Respecto de Facundo, recordó que había participado encapuchado en algunos de los enfrentamientos  y que“”estaba arengando todo el tiempo, tenía una forma de hablar muy soberbia e incluso nos amenazó y no tuvimos más contacto”, agregó la mujer.

La incursión en Villa La Angostura, “escuela para el actual escenario”

Comunicado de la RAM, abril de 2014

“Hasta la explosion del conflicto en Paichil Antreao, veniamos trabajando desde mucho tiempo antes de manera silenciosa y cotidiana, en otras zonas con conflictos territoriales y acumulando conocimiento y fuerzas Mapuche, por esta razon es que se dio nuestra aparicion publica en el conflicto estrategico de villa la angostura frente a inversores turísticos (…), en este lugar se desarrollaron acciones de resistencia y autodefensa publica frente a la represion brutal y desmedida”

“ Se logró mantener la posesion efectiva de tierras recuperadas como la recuperacion de nuevos espacios, se constituyo una zona liberada Mapuche (…)pero pronto esa experiencia fue cortada por dos partes una fue la intervencion del estado por medio de una dirigencia awinkada y corrupta, como por otro lado y en paralelo la intromision de grupos reformistas igual de corruptos y vendidos pero con discursividad seudomapuche, aun asi en condiciones adversas se logro mantener una linea de lucha y resistencia por algun tiempo, haciendo escuela para el actual escenario, hasta que se prefirio abandonar politicamente el lugar a merced de las mayorias tristemente engañadas”.

 Por temor, una familia se mudó

Eran las 4 de la mañana del domingo 16 de enero de 2011 cuando el matrimonio, que intentaba dormir a su pequeño bebé, escuchó gritos en el patio y vio cómo un grupo de jóvenes entre 4 y 5 personas arrojaban artefactos incendiarios y piedras a su casa. Gritaban frases en mapudugun y tiraron dos objetos tipo bombas motolov , de los cuales uno prendió una tabla. El hombre llegó a apagar el fuego, y el incidente por fortuna no pasó a mayores.

El incendio fue en una vivienda ubicada en la calle Traful, en el barrio Epulafquen, al pie de las tierras que durante meses fueron escenario de enfrentamientos. En aquella oportunidad la RAM también se adjudicó el hecho, pero aclaró que el acto sólo había sido contra la propiedad, “no contra la vida de personas”.

Sin embargo, la hipótesis de la justicia – que oficialmente nadie quiso reconocer-   es que el grupo había querido atentar contra una funcionaria de la secretaria penal que vivía al lado en una casa similar y que tenía un auto muy parecido.

Hechos adjudicados a la RAM

Entre 2009-2011la RAM habría protagonizado al menos 13 actos violentos, entre ellos, ocho incendios e intentos de incendios de casillas en el lote de un propietario, el quincho donde funcionaba el “Canopy”e intentaron incendiar una vivienda cuando el matrimonio y su pequeño hijo estaba adentro. También protagonizaron enfrentamientos con la policía en el acceso al Belvedere, apedrearon un auto y en 2010 usurparon una hostería en construcción.

 Causas

Facundo Jones Huala estuvo imputado en tres causas por daño, uno de ellos,  por daño agravado  vinculado el incendio de la vivienda en el barrio Epulafquen. Pero por falta de pruebas que acrediten su presencia en todos los hechos, las causas fueron archivadas.

 *Periodista diario Río Negro y directora de DiarioAndino
Informe publicado en el diario Rio Negro

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