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ACCESOS COMPLICADOS

Por la construcción de un muro de contención, un particular reduce a la mitad el acceso al Correntoso

Se trata de la obra que se edifica en la entrada al lago Correntoso. La reducción de la calle no será definitiva y el municipio se comunicó con el constructor para que acelere los tiempos y vuelva a ensanchar la calle. Las dudas sobre el reclamo Mapuche.
13/09/2018
Por la construcción de un muro de contención, un particular reduce a la mitad el acceso al Correntoso

La construcción de una vivienda y una marina que edifica el desarrollador Rubén Sidoni en el acceso del camino de tierra (calle Capraro) al Río Correntoso, provoca por estos días inconvenientes con el tráfico vehicular: solo pasa un auto y suelen originarse colas esperando que avancen todos los que van en un sentido para luego avanzar los que se dirigen en sentido contrario.

 Esto se debe a que el constructor debió “achicar” el ancho de la calle, ya que dentro de su terreno edifica un muro de contención para evitar posibles deslizamientos de tierra.

“Ya lo hemos notificado para que termine cuanto antes esos trabajos, porque es verdad que está siendo incómodo para el tránsito. De todas maneras no se trata de una reducción definitiva de la calle ya que una vez finalizados los trabajos, la calle volverá a su estado anterior”, explicó la actual Secretaria de Obras Particulares, Beatriz Tyczynski.

Cabe recordar que tras el derrumbe que se originó en abril pasado en el lugar y luego del reclamo mapuche, el mismo intendente Guillermo Caruso confirmó a Diario Andino que tomó vista del expediente de dicha construcción y según afirmó: “ no presenta ningún punto irregular que nos obligue a paralizarla”.

El “reclamo” mapuche

En marzo del año pasado,  la comunidad Mapuche Paisil Antriao había paralizado la obra  por considerar que se avanzaba sobre un territorio que les pertenece por derecho ancestral.

Esa “acción de resguardo”, explicaron los mismo mapuches se concretó porque “están haciendo este nuevo acceso a la playa  con el objetivo de seguir construyendo cabañas. Esto implica un gran peligro para todos porque los privados siguen construyendo y no respetan la Ley de Bosques, ya que esta zona está en zona roja”.

Luego de esa acción, la Comunidad Paichil Antriao envió una nota a la delegación de Bosques local para informar e instar al organismo sobre el apeo de árboles.

“Una vez más se presenta los intereses de los especuladores inmobiliarios sobre nuestro territorio!!! Y una vez mas esta involucrado el gobierno provincial y municipal, el lugar afectado esta ves es sobre calle publica Cacique Antriao a unos 100 metros del cartel que esta sobre ruta 40 que indica entrada al lago correntoso. Como lof Paicil Antriao nos haremos presente en el Lugar afectado, a la cual hemos citado al municipio y a la direccion de Bosque. Le vamos a pedir la paralizacion de la obra por todas las irregularidades que tiene ESE emprendimiento, ya se nota el impacto forestal y ambiental y con riesgo de derrumbe con consecuencias irreparables", sostuvo la comunidad en un comunicado.

 Pese a todo eso y a que en su momento incluso llegaron  reunirse con el mismo intendente Caruso, llamativamente “ de un día para el otro” se abandonó el reclamo.

Fue entonces que surgieron versiones que indicaban que “se llegó a un acuerdo económico entre el desarrollador y la misma comunidad para no paralizar la obra”.

En varias ocasiones este medio lo consultó al Werken Florentino Nahuel respecto de ese posible acuerdo, y  lo negó rotundamente: “No. Eso está dentro de lo que es el Relevamiento Territorial y no se va a resignar el recamo”, aseguró.

 No obstante, llama poderosamente la atención que los mismos Mapuches paralizaron los trabajos y el ingreso de materiales y maquinas, y montaron un resguardo permanente en el loteo que avanzaba en el faldeo del Belvedere a orillas del Lago Correntoso y en esta obra, permitan que avance la construcción.

 

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