martes 16 de abril de 2024    | Lluvia ligera 8.6ºc | Villa la Angostura

“Hay mucha gente lavándose las manos, cuidando su trasero”

Ante el reciente accidente ocurrido con un buey en la Ruta 40, Edgardo Krembs comenta el hecho similar que le ocurrió el pasado 29 de agosto y reflexiona sobre la falta de respuestas de algunas instituciones.
18/01/2016
“Hay mucha gente lavándose las manos, cuidando su trasero”

Sr. Director:

En el día de hoy, he leído en las noticias que se ha producido un accidente, en el que una persona en automóvil colisionó contra un buey, en la Ruta 40.

He sufrido un accidente similar, el día 29 de agosto, en la zona del paraje Huemul. En aquella circunstancia, el buey falleció, y por fortuna no he sufrido ninguna lesión, salvo mínimos cortes producidos por las astillas del vidrio del parabrisas.

Un par de semanas más tarde, elevé nota a las diversas dependencias públicas que tenían (a mi entender) jurisdicción sobre el hecho, o que yo había visto actuar. En la nota, les pedía que me informaran por escrito de cuáles habían sido los trámites o diligencias realizadas. El motivo de pedir las cosas por escrito era, por un lado, analizar la posibilidad de llevar adelante alguna acción legal, y por otro, intentar “blanquear” la gran cantidad de información off the record que me llegaba, incluso de parte de algunos funcionarios. Las respuestas fueron:

a)      La delegación local de fauna, que tiene a su cargo el registro de marcas de animales, me contestó en 24 hs., diciéndome que no habían recibido ninguna solicitud de ninguna otra institución para la identificación del animal. Gracias, Lolo, por responder tan rápido.

b)      Bomberos me contestó, describiendo su accionar de esa noche (impecable, por otra parte). Gracias, Karina, Camila y todos los demás.

c)       Parques Nacionales me contestó prolijamente describiendo los hechos, y diciendo que la investigación había quedado a cargo de la Policía local.

d)      La Policía local….. NUNCA me contestó. Fui unas 10 veces, y no hubo caso. No lo logré. Siempre muy corteses para atender, pero no me llegó nunca una nota de respuesta, a pesar de prometérmelo varias veces. “Mañana mismo se la alcanzamos a su domicilio”. Pero no.

Cuando veo que los accidentes siguen sucediendo, no puedo menos que indignarme, porque los funcionarios e instituciones tienen responsabilidades que evidentemente no asumen. Nadie se hace responsable, mucha gente lavándose las manos, cuidando su trasero, mientras que el buey era abducido por una camioneta japonesa blanca y yo buscaba otro auto para comprar. Cuando se produzca un accidente con víctimas fatales (ojalá nunca suceda), todos diremos “qué babaridad!!!!”, haremos discursos de circunstancia, llenos de frases hechas, y los funcionarios pondrán cara de compungidos. Y todo seguirá igual. Así estamos.

Te puede interesar
Últimas noticias