Vecinos del Barrio Mallín se quejan por los líquidos cloacales en las calles

Tal como ocurrió la semana pasada en el arroyo Las Piedritas, esta vez los vecinos del barrio El Mallín colocaron un cartel donde dejaron ver su enojo por la presencia de líquidos cloacales, esta vez, en las calles.

 El cartel, montado sobre un caballete y con cintas de “peligro”, fue instalado en la calle Vargas.

 Según explicaron, “es inhumano vivir así. Hay olores cloacales que se sienten ya hace un tiempo. En estos últimos días hubo varias personas que se han descompensado por el olor. Necesitamos una solución urgente”, dijo una vecina que se comunicó con Diario Andino.

Asimismo, señaló: “Ya se viene el calor y el olor va a ser peor. Pedimos que esta foto llegue a todos los vecinos de Villa la Angostura en especial a las autoridades encargadas de esto”.

“Esto no es nuevo. Hace tres meses que se vienen rebalsando una tapa que está frente a mi casa. Pero otra tapa que está más abajo, rebalsa desde hace tres años y nunca viene nadie a ver la situación”, contó uno de los vecinos que instaló el cartel.

Cabe recordar que la semana pasada, dos vecinos del barrio Mallin, Eliana y Mario, plantearon en el Concejo Deliberante las demandas desatendidas  y la necesidad de que el Ejecutivo comience a solucionar los problemas históricos del barrio.

El problema principal, según relataron en esa ocasión, “es el vertido de efluentes cloacales en las calles, que genera un nivel de contaminación y riesgo sanitario alarmante. El suelo está saturado y no absorbe más”, indicaron.

Esperaban que la planta de tratamiento, cuya obra de infraestructura fue inaugurada en junio por el presidente, ya estuviera operativa. Muchos vecinos ya se conectaron al caño maestro, pero todavía la planta no está operativa y la situación es peor. Lo mismo sucede en el barrio Once, donde los efluentes se vuelcan crudos al arroyo Piedritas.

Esta semana el intendente Fabio Stefani viajó a Neuquén y entregó al EPAS una nota solicitando que comience a operar la planta aunque sea de manera mínima, para poder evacuar los efluentes que generan conexiones clandestinas.