El valor del bosque

Cuántas veces, caminando por la avenida o por cualquier calle de nuestro pueblo, nos hemos detenido a mirar el cerro Bayo y los que están a su lado o los que están frente de los lagos?

Admiramos sus bellezas dependiendo de la época del año, nieve – verde – rojizos, y sin mucho análisis tomamos conciencia de la importancia y valor de cada uno de los árboles que forman el bosque en la laderas montañosas?

Vemos a los turistas sacarse fotos con el fondo del bosque. Miles de fotos se llevan en sus cámaras que comparten y maravillan a sus amistades y que guardan en sus retinas y recuerdos con la consigna de siempre volver…

Nosotros, que vivimos aquí, lo valoramos en todas sus dimensiones??

El valor del bosque no se cuantifica por el precio de la madera y leña que de él pueden obtenerse. Ni por los ingresos que generan los turistas que lo visitan y admiran.

El bosque posee recursos y cumple funciones difíciles de traducir a bienes económicos.

Comenzamos con el recurso del agua. ¿Cómo es posible que en pleno verano y luego de varios días sin lluvias, el suelo permanezca húmedo? Incluso en sitios donde no hay montañas nevadas, esto es así. La explicación por supuesto está en los bosques. Ellos regulan la economía del agua.

Después de la lluvia y las nevadas invernales, el agua queda detenida en el horizonte de las raíces, solo una pequeña cantidad escurre por la superficie. De esta manera se retrasa la entrega de agua a los ríos. Esto además de garantizar humedad al suelo durante todo el año, evita inundaciones, desbordamientos y la erosión del suelo.

Talar grandes superficies de bosque puede elevar el nivel de los ríos subterráneos y producir desastres ecológicos.

Además el bosque es un excelente filtro del agua. En sitios muy poblados y con altos niveles de contaminación, conservar los bosques es esencial para garantizar la potabilidad del agua de las montañas.

Otra característica de los bosques es que ayudan a fijar el suelo. Sitios sin cobertura vegetal son fácilmente erosionables por el viento y el agua. Es fácil ver  laderas de montañas escarpadas,  donde a menudo se produce corrimientos de tierra y desprendimientos de rocas.

Otro beneficio que aportan los árboles es retener el dióxido de carbono de la atmósfera, algo muy necesario para revertir el “efecto invernadero”.  Se habla mucho de los bosques como generador de oxígeno, pero de las consecuencias que produce el intercambio que realizan con  la atmósfera, la fijación del dióxido de carbono, es más importante.

También los árboles son excelentes filtros de aire. Las hojas retienen las partículas suspendidas y las devuelven al suelo con la lluvia. Y ayudan a amortiguar los ruidos, ventaja poco considerada en regiones de bajo poblamiento, pero que es muy importante en cercanías de grandes ciudades, autopistas y polos industriales.

Existe en él una rica biodiversidad de flora y fauna donde interactúan tanto árboles y arbustos  como animales, incluyendo mamíferos, pájaros, peces, reptiles e insectos. Así mismo, todos los anteriores interactúan con el suelo, la atmosfera y las condiciones climáticas; cada uno de ellos cumpliendo funciones específicas y creando una cadena perfecta para garantizar la supervivencia y el equilibrio del ecosistema.

Tenemos presentes estos beneficios que nos brindan los bosque cuando debemos tomar decisiones de realizar obras y construcciones en lugares poblados de árboles?

Somos conscientes de  las modificaciones y las consecuencias de nuestro decisiones?

Hay una conexión íntima entre la deforestación y el cambio climático: en la Argentina provocó el 22% de las emisiones de gases de efecto invernadero, según consta en el último inventario de emisiones.

En 2012 la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó este día para rendir homenaje a los bosques y generar conciencia sobre su importancia y cuidado.  El lema elegido para este año es “Restauración forestal: un camino a la recuperación y el bienestar”, establecido con la finalidad de poner foco en la necesidad de la restauración y el manejo sustentable de los bosques, ecosistemas fundamentales para hacer frente a la crisis climática y de biodiversidad que enfrentamos actualmente. 

Ésta es una invitación a que seamos más conscientes de todos los beneficios que la naturaleza nos regala y a que valoraremos todos sus regalos.

Nos acostumbramos a que la vegetación nos rodea y forma parte de nuestras vidas, pero no entendemos que sus recursos son agotables y limitados.

Respetamos y valoramos a los árboles y los bosques que forman?

Ellos que son nuestros protectores ecológicos, lo sabías?

Ines Dominguez para Arbol Vla.

Fuentes: Guía&Sendas bosques. S&b ediciones. Fundación Vida Silvestre.

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