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Sauco, toda la salud en un solo árbol

Los poderes medicinales del Sauco son conocidos desde la Edad de Piedra, además se le atribuyeron propiedades mágicas y religiosas. Conozcamos los secretos detrás de este árbol con una historia que va mucho más allá de dulces o licores. Por Melina Pariente.
19/06/2015
Sauco, toda la salud en un solo árbol

 Infusión de flores de Sauco
El Sauco (Sambucus Nigra) es originario de Europa, crece en zonas soleadas con suelos frescos y cierta humedad. Los españoles lo llevaron y propagaron por América, en donde se estableció en diferentes zonas. Son árboles pequeños o arbustos, sus tallos son huecos y frágiles, dan pequeñas flores de color blanco seguidas por grupos de bayas de color negro azulado.

Entre sus numerosas propiedades, esta planta contiene aceites esenciales, taninos, azúcar, flavonoides, carotenos, abundante vitamina A, B y C, potasio, calcio y hierro.

Actúa como diurético, antiinflamatorio, anticatarral, antiviral, antioxidante y hasta se lo usa para productos de belleza.

Resfrío, gripe y fiebre

Con las flores de Sauco se prepara una excelente infusión para el resfriado, los estados gripales y los estados febriles leves. La infusión caliente de sus flores puede tomarse con miel para suavizar la garganta.

Las flores también poseen propiedades sudoríficas, que colaboran en los procesos febriles. Al estimular la sudoración, se libera calor y el organismo se refresca.

Las bayas maduras del sauco contienen altos niveles de vitamina C y son potentes antioxidantes, se puede tomar jarabe o extracto de bayas de Sauco para combatir infecciones y acelerar la recuperación. Una reciente prueba clínica descubrió que el extracto de bayas de Sauco reduce el tiempo de recuperación en los enfermos de gripe.

También, pueden consumirse las bayas para aumentar la resistencia y prevenir infecciones, subir las defensas y reducir la tendencia a los resfriados, dolor de garganta y tos. Son ideales para esta época del año.

La flor de Sauco puede secar y tonificar las mucosas de la nariz y la garganta, reduciendo los estornudos, la picazón y el goteo nasal. También, se emplea para problemas catarrales crónicos, que afectan los senos nasales y el oído medio.

¿Cómo hacer un jarabe de Sauco para la tos?

¡Es muy fácil! Hace falta:

1 kilo de bayas bien maduras

Agua

1 taza de azúcar o miel de abejas.

Procedimiento:

Poner en un recipiente las bayas bien machacadas, añadir agua hasta cubrirlas totalmente, agregar el azúcar o la miel y poner el recipiente al fuego. Remover bien hasta que tenga consistencia de jarabe.

Conservar en un frasco con tapa hermética, se puede guardar en la heladera para que dure más tiempo.

Un botiquín natural

El Sauco tiene muchísimas más propiedades para sorprendernos:

-Analgésico

La flor del Sauco y sus bayas tienen propiedades analgésicas, si las flores se hierven a fuego lento, el cocimiento se puede usar para reducir las molestias de la artritis, reumatismo y otros problemas de articulaciones. También, es útil para el tratamiento de enfermedades de encías, como la gingivitis y hasta la inflamación de garganta puede disminuir haciendo gárgaras o enjuagues.

-Belleza

La simple infusión de las flores del Sauco sirve como acondicionador de la piel, para tonificar y rejuvenecer los tejidos. También ayuda a eliminar manchas en el rostro y acné. Es un ingrediente recurrente en cremas de tratamientos de belleza alrededor del mundo.

-Alergias

Para alergias estacionales se recomienda hacerse vahos con sus flores, o beber una infusión de éstas. Las compresas con la infusión también alivian pieles y ojos irritados.

-Diurético

La corteza del Sauco posee efectos diuréticos, se recomienda su consumo en casos de gota, retención de líquidos, inflamación de las vías urinarias o edemas.

-Depurador de la sangre

Tiene efectos beneficiosos para problemas de la piel como eccemas y dermatitis. También se usa en compresas para hematomas, contusiones y torceduras. Es eficaz para las hemorragias nasales.

-¡Cuidado!

Las bayas crudas del Sauco pueden contener toxinas, se hace hincapié en consumir sólo bayas maduras del Sauco, únicamente después de haber sido cocinadas.

No se debe confundir con el Sauquillo o Yezgo (Sambucus Eubulus), con frutos de apariencia similar, pero venenosos.


Bayas o frutos del Sauco
El Sauco a través de la historia

Se utiliza desde la edad de piedra como alimento, medicina, como planta de jardín, para teñir el cabello, telas y hasta para fabricar instrumentos, el nombre científico del Sauco (Sambucus) procede del griego “Sambuké” que significa flauta.

El árbol siempre estuvo ligado al mundo de la magia. Los druidas Celtas lo consideraban como morada de elfos, cualquier persona que maltratara un Sauco recibiría la ira de estos seres, manifestada con enfermedades para él o su familia.

Algunas leyendas centro europeas aseguraban que debajo de cada Sauco vivía una anciana a la cual debía pedirse permiso para cortar el árbol. También se creía que los niños no podían dormir en cunas hechas con madera de Sauco.

En la península Ibérica, estos árboles tuvieron muchas aplicaciones mágicas, por ejemplo en Galicia se pasaban ramas de Sauco por los lomos del ganado cuando se consideraba que tenían “mal de ojo”. También se llevaba una rama de Sauco en el bolsillo para liberarse de todo tipo de influencias negativas.

En la antigua Inglaterra se dice que los magos usaban varitas de Sauco para ser invisibles ante cualquier otro mago. Tal es así, que en la serie de libros Harry Potter, de la escritora británica JK Rowling, es con madera de Sauco que se elabora la varita letal, o varita del destino, considerada la más poderosa del mundo en este relato.

En Inglés al Sauco se lo denomina “Elder” que significa adulto mayor, anciano, líder o sabio.


Harry Potter y la varita de madera de éste árbol.
Champagne de Sauco

Los champagnes y licores de flores de Sauco son populares en todo el mundo y son comercializados por bodegas premium en varios países.

Hacerlo es muy fácil, tan sólo se necesitan flores de Sauco, azúcar y un poco de paciencia.

La receta:

Colocar 12 penachos de flores sin los cabos verdes en un bidón o jarra grande. Agregar medio kilo de azúcar blanca, dos cucharadas de vinagre de manzana, cáscara rallada de un limón y el resto del limón cortado en rodajas. Se le puede agregar jengibre para darle más sabor. Después 4 litros y medio de agua. Agitar y dejar reposar dentro del bidón durante 24 horas, tapado con un trapo en un lugar oscuro. Después de las 24 horas, colar tirando todos los ingredientes sólidos y vertiendo el líquido en botellas de plástico. Dejar descansar en lugar oscuro durante 20 días. Cuidado al destapar ya que contiene mucho gas, se recomienda abrir la botella todos los días un poco para que no acumule demasiado. ¡Salud!

 


Flores de Sauco
 

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