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“¿Bipolaridad o sujeto del inconsciente?”

En esta entrega, la psicóloga Violeta Paolini explica las confusiones que actualmente suelen darse con el termino “Bipolar” y cómo, cuando  y por qué debe someterse una paerson a tratamiento. Escuchá hoy su columna a partir de las 12:00 por Fm Andina.
04/12/2018
“¿Bipolaridad o sujeto del inconsciente?”

 Hoy en día, llegan a la consulta pacientes diagnosticados con el famoso término “bipolar”, siendo compleja y delicada la cuestión de las etiquetas y erróneo el diagnóstico.

Rastreemos un poco la historia.

Belaga, hablando del trastorno bipolar, por un lado, y por otro, la manía y la melancolía, ubica que ambos tienen diferentes orígenes temporales y se inscriben en diferentes paradigmas dentro de la psiquiatría.

La manía, la melancolía y la locura circular, de la Escuela Francesa, la psicosis maníaco-depresiva de la Escuela Alemana, responden a los grandes relatos que se conocen como la "psiquiatría clásica". A su vez, G. Lanteri Laura ha descripto una serie de paradigmas de la psiquiatría moderna, consignando que estas descripciones se ajustan al paradigma de las enfermedades mentales. En 1957, Karl Leonhard propone una clasificación de las psicosis endógenas basadas en la polaridad. Así surge esta entidad, cuyo antecedente ineludible son las psicosis maníaco-depresivas descriptas por E. Kraepelin, que agrupa los cuadros afectivos en esta única categoría.

Silvia Ons comenta que “La palabra "bipolar" ha pasado a formar parte del lenguaje cotidiano y es empleada por doquier. Ya no solo la usan los psiquiatras y los médicos sino también los legos ya que se presta a múltiples aplicaciones. Cualquier cambio de estado de ánimo será pensado como signo de bipolaridad, cualquier discordancia llevará ese nombre, cualquier altibajo tendrá esa impronta, la más mínima disparidad, su etiqueta.

Prontamente advertimos que el vocablo se presta a una suerte de función multiuso apta para diversas aplicaciones ya que el ser humano es contradictorio, suele tener ambivalencia en sus afectos, los humores son cambiantes, las contingencias de la vida lo afectan, no reacciona siempre de una única forma. Y si "bipolar" es quién no es totalmente idéntico a sí mismo...todos seríamos bipolares.

Pero aún en usos más específicos, en los últimos años he recibido pacientes que llegaban a la consulta con un diagnóstico psiquiátrico ya realizado: "trastorno bipolar". De hecho habían experimentado ciclos importantes de manía: insomnio, verborrea, excitación psicomotriz, pasajes al acto. En todos estos casos, detecté con sorpresa que el "trastorno bipolar" se había desencadenado luego de la administración de antidepresivos. Antes de tal eclosión habían sido tratados como depresivos y, meses después, como bipolares. Interesada por este fenómeno interrogué a psiquiatras orientados a las neurociencias y avisados en el uso de tal medicación y me respondieron que tal secuencia se debía a que el paciente había sido inicialmente mal diagnosticado, al no contemplarse la posibilidad de una manía latente.

No siempre la tristeza fue considerada por el creador del psicoanálisis como una manifestación patológica .

En su célebre artículo "Duelo y melancolía" Freud diferencia el duelo de la melancolía; el estado de ánimo profundamente doloroso, la cesación del interés por el mundo exterior, la pérdida de la capacidad de amar, la inhibición de todas las actividades, son elementos comunes a ambos. Estos estados se han desencadenado a partir de una pérdida que puede ser la de una persona, la de un lugar o la de un ideal. Un solo ingrediente recae con exclusividad en la melancolía: la extraordinaria disminución del amor propio y el autoreproche que llega hasta el delirio moral de empequeñecimiento.

Más el dolor, la pena y el eventual retraimiento que implica el duelo, son considerados por Freud como fenómenos normales que testimonian ,en última instancia, que los objetos no pueden sustituirse tan fácilmente por otros, que los seres no son descartables, que lleva tiempo el proceso de desasimiento, que hay apego, viscosidad libidinal. El psicoanálisis le da al duelo un inestimable valor, y Freud, M. Klein y Lacan ubicaron el proceso de duelo en el análisis, pudiéndose afirmar que no hay análisis sin duelo.

Eric Laurent comenta en una entrevista que el bipolar es como la depresión. Es un excelente significante. Probablemente es un genio del marketing el que lo inventó, piensan en términos de marketing. Se sabe que los grandes laboratorios farmacéuticos tienen ahora departamentos de marketing enormes, en el cual tratan de ver los efectos de los significantes que es el marketing. Es decir, tratan de medir esto, si le gusta la época. Lo bipolar, la bipolaridad, un mundo bipolar.

Es por razones profundas que pasa esto. Y tenemos que hacer con los significantes que tienen éxito, depresión, bipolar inclusive. Usted es un bipolar pero con la consistencia del RSI, el nudo particular que usted tiene, entonces usted es un bipolar muy especial

Digamos, no hay que luchar a nivel de las categorías, vamos a perder. El problema no es convencer digamos, cuando decía si hay bromas esto de que hay sujetos que dicen ‘soy un psicótico ordinario’, ya lo pasamos, pero más allá de esto el problema no es convencer la gran industria de nuestras civilizaciones de utilizar nuestros significantes. Ellos producen sus propios significantes, tienen una industria de fabricaciones. Pero tenemos que utilizar estos significantes para más bien pasar al nivel de lo particular, o de lo singular. Y eso es un recurso muy potente.

Entonces los recursos es cuando alguien viene, no es que no tenemos recursos, se escucha al sujeto, se ve que está en un estado agudo, hay que internarlo se lo interna, y al poco tiempo otra vez está libre. Dos meses, quince días, y después, hay cincuenta años, el sujeto se interna sin tomar la medicación que ha tomado durante un cierto tiempo, y va a ver al analista, con la medicación primero, después de esperar el desarrollo más o menos se espera un momento en el cual se le puede construir como se dice, una ventana de oportunidad para quitar la medicación, después de un cierto tiempo se ve si el sujeto puede manejarse así, etc.

Y en la consulta privada podemos acoger mucho tipo de patologías, pero con la idea hay que utilizar todos los otros recursos que existen, la medicación, la internación, tener una conversación con médicos psiquiatras que pueden entender distintos aspectos de la trayectoria subjetiva del sujeto.

 

Continuaremos conversando en la Radio

 

 

 

Violeta Paolini, MIembro de la EOL y AMP.

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