Sendero del rio Bonito: Tras el rechazo de la mediación, el propietario cerró totalmente el paso peatonal

“Esta es la línea de Mojones. Como ves, el sendero pasa totalmente dentro de nuestro terreno”, explica Claudia Calbet señalando el primero de los hierros y trazando una línea con la mano que une el segundo y el tercero.

“Lo que pasó acá es que los mojones no llegaban hasta el agua, pero el río se comió terreno.  Si en algún momento acá había un sendero, el río se lo comió y como esto era bosque, la gente trazó un nuevo camino, mas arriba, para seguir pasando”, agregó.

Efectivamente, el primero de los mojones que señala está a centímetros del agua y de la cerca que construyó y que hoy impide totalmente el paso por ese sector del camino peatonal declarado “Área Protegida” pro el municipio desde el año 2005. ( Ver aparte).  
“La verdad es que con mi marido teníamos pensado hacer el sendero peatonal por fuera de nuestro terreno. No teníamos problemas si el municipio traía piedras y hombres para la obra. Incluso si rellenaban encima del primero mojón. Pero nunca hubo voluntad por parte de la intendencia”, afirmó la mujer.  

En este marco, mostró una grabación de una reunión que se realizó el año pasado en la sede de Salmónidos, donde estuvo presente el representante de Atención al vecino Pablo Macías por el Municipio, vecinos del lugar y de la Junta Vecinal del Puerto Manzano. “Ahí se pidió a la municipalidad que viniera a ofrecer algo y nunca se acercó. Además detalló que le pidió a la Junta Vecinal “una carta para publicar en Diario Andino y poder limpiar mi nombre, pero nunca la hicieron”.

 Según el relato de Calbet, tanto a ella como a sus vecinos, les molesta “no tener privacidad” en sus parcelas debido al continuo paso de peatones. Cabe remarcar que el sendero “por uso y costumbre” y como “Área Protegida”, es anterior a las edificaciones que se hicieron entre el lote de Fundación Salmónidos y el lote de Gerosa ( que llega hasta la desembocadura en el Lago Nahuel Huapi), por lo tanto, cuando compraron la tierra y cuando edificaron, todos y cada uno ya sabía de la existencia del camino peatonal.

Días atrás, Calbet permitía el paso por su lote y según ella, “solo pedía que pasen caminando los que vienen en bicicleta porque mis perros sino los siguen”. No obstante, al enterarse que el municipio no está dispuesto a ir a una mediación judicial para resolver el tema, subió la apuesta y a la cerca le instaló una tela sombra sobre un armazón de alambre, con lo cual impide el paso ya que para continuar el sendero, actualmente es necesario caminar por al gua ya que la poca orilla que queda en el sector está atiborrada de plantas.

“A la gente se le daba una cortesía (cuando estaba instalada la tranquera), pero la gente es muy imprudente porque pasaba ignorando el cartel que decía que camine y no lo respetaban. Incluso algunos pasaban buscando problemas y se han metido hasta el deck de mi casa.   

La legislación

Según Calbet, como el río Bonito no es un río navegable, “no existe el camino de sirga y por lo tanto no está obligada a ceder parte de su lote al sendero.

“No hay servidumbre de paso y la ordenanza no tiene validez, no existe. Todo lo que han presentado en la Justicia no tiene validez”, insistió.

D.A: Si vos compras un terreno en el cual ya había un sendero garantizado, y pretendes que se anule ese paso peatonal, genera rechazos...

C.C: “No quiero mas que la gente entre a mi propiedad y nos maltrate. Yo quiero que se paren las denuncias y con esto se paran ( la cerca). Esa cortesía que les dábamos (la tranquera) no les importó. En verano es constante el paso de personas y los perros están dentro de mi lote y cumplen con sus función que es cuidar. Mis derechos como propietarios ¿Dónde están?”

El altercado

 El verano pasado dos mujeres denunciaron por agresiones a Calbet y su esposo. Según narraron en ese momento, luego de ser mordida por uno de los perros, el hombre les habría ofrecido plata para que no radiquen la denuncia y luego fueron agredidas por la propia Caldet.

No obstante, la versión de Calbet es distinta: “cuando pasaron por acá yo les pedí que se bajaran de la bicicleta y eso las enfureció”.

 Respecto de las mordeduras que una de las mujeres dijo haber sufrido por parte de unos de los perros de la pareja, Calbet indicó: “le miramos el talón y parecía una mordedura vieja porque nunca tuvo sangre”.

“Estas chicas siguieron a mi marido poniéndole el celular en la cara, filmándolo y provocándolo. Yo me fui en el sentido contrario con mi perro y luego me comenzaron seguir. Me asusté muchísimo al verlas y otra vez me amenazaron con el poder que tenían, con los cargos que ocupan”.

 Por último negó haber intentado quitarle el celular a una de las mujeres para tirárselo al río: “lo que hice un movimiento ( gesticula con el brazo como queriendo quitarse de la cara algo molesto) es una reacción normal. Además yo también recibí golpes en la cara y no hice la denuncia porque pensé que eran turistas”.