Caso Gatica: según el abogado querellante, “la reautopsia confirma la hipótesis de la asfixia”

El abogado Luis Virgilio Sánchez afirmó que “la reautopsia deja en claro que la muerte de Robinson Gatica se produjo por asfixia por compresión producida por una rodilla que lo sostenía contra el suelo, como sostuvimos desde el primer momento”.

Gatica, empleado de la municipalidad de Villa La Angostura de 32 años, murió durante un violento procedimiento policial en su vivienda. Hay cinco policías imputados, todos en libertad pero con prohibición de acercarse a la familia de la víctima.

 “Estuvieron de acuerdo”

Virgilio Sánchez respondió que “la reautopsia se realizó en presencia del Cuerpo Médico Forense, quienes se encargaron de sacar las fotos y asistir todo el procedimiento. Sus integrantes pudieron haber realizado un informe en ese momento y dárselo a la perito Creimer, pero no lo hicieron, ya que estaban de acuerdo con todo el procedimiento y con las observaciones y hallazgos que iba exponiendo la profesional “in situ” mientras se desarrollaba la pericia y hasta que finalizó».

Es decir que «descalifican un trabajo en el cual ellos mismos participaron, cuando nada dijeron en su momento», agregó.

“De todos modos -continuó Sánchez- el informe que realizan los forenses Gabriel Jerez y Haydée Fariña en respuesta a Creimer técnicamente no es una pericia, es una opinión».

Contrasta y complementa

Las pericias son dos: la autopsia y la reautopsia. Esta última “contrasta y complementa con evidencia científica las conclusiones primeras realizadas por el Cuerpo Médico Forense y sanea todas sus deficiencias, arrojando luz sobre puntos que no estaban claros y que ni Jerez ni Fariña supieron responder a las partes cuando tuvimos una reunión en la que participó el perito Pellegrini”.

El abogado querellante afirmó: “creo que tanto Jerez como Fariña se vieron expuestos frente al contundente informe realizado por una profesional de fuste y de reconocida trayectoria, e intentaron defender su labor profesional en base a descalificaciones infundadas”.

Por último indicó que “a nosotros no nos preocupan los egos de los profesionales, lo importante es que la reautopsia arrojó luz sobre cuestiones que no estaban claras en la autopsia inicial y la actitud que asumieron los profesionales firmantes del informe crítico, habla más de ellos que de la propia pericia que critican”.

 “Condiciones NO óptimas”

La primera autopsia, realizada en Neuquén el 21 de julio del 2022 -al día siguiente del operativo- concluyó que su muerte «presenta características compatibles con muerte violenta» pero «se debió a causa indeterminada».

Ese primer informe contiene una aclaración muy relevante: «es de destacar que el cuerpo de la persona fue recibido en condiciones NO (mayúsculas en el original) óptimas para la realización de la autopsia, sin cadena de custodia, sin protección de manos y sin el correspondiente embolsamiento que por protocolo corresponde realizar a la empresa de traslado de cuerpos».

Gatica murió en su casa, y su cuerpo fue trasladado al hospital de La Angostura por orden de la policía, sin esperar la presencia del fiscal, ni de personal de Criminalística ni del Cuerpo Médico Forense, y luego derivado a Neuquén en una camioneta en las condiciones antes señaladas.

Tampoco se estableció un cerco perimetral, y la escena del crimen fue alterada.

El fiscal Adrián De Lillo apartó a la Policía de Neuquén de la investigación, y trabaja en el caso con Gendarmería.

Juntas médicas y reautopsia

En octubre del año pasado, una junta del Cuerpo Médico Forense del Poder Judicial de Neuquén llegó a la conclusión de que Gatica fue víctima de «síndrome de delirio agitado por consumo de cocaína en contexto de restricción policial».

Ese mismo mes hubo otra cumbre de médicos y abogados, y se decidió la reautopsia del cuerpo, para lo cual se procedió a la exhumación en diciembre.

El informe Creimer

En enero pasado, presentó sus conclusiones ante la fiscalía la perito de la querella, Emma Virginia Creimer, Especialista Consultora en Medicina Legal, Especialista Jerarquizada en Clínica Quirúrgica, Diplomada en psicología Jurídica y forense, asesora nacional e internacional en delitos contra los DDHH, Delitos contra las Infancias y Delitos contra las Mujeres y directora Académica de la Consultora Pericial de Ciencias Forenses, entre otros abundantes antecedentes.

El trabajo tiene 155 páginas. Allí expone la hipótesis de la muerte por asfixia y la fundamenta. «La inusual cantidad de lesiones durante la represión, incluyendo heridas por distintos tiempos de disparo con arma de fuego de proyectiles múltiples en región inguinal izquierda, cara externa de tobillo izquierdo y cara externa casi posterior tercio medio de muslo izquierdo , así como las múltiples lesiones contusas y excoriativas descriptas en la primera autopsia, y las lesiones cráneo cérvico torácicas en planos musculares profundos evidenciadas en la operación de reautopsia, muestran con contundencia que se trató de una muerte violenta y que la misma se produjo por asfixia por compresión extrínseca de cuello y tórax (sumando a estas lesiones los signos asfícticos evidenciados en la primera autopsia) y por politraumatismo debido a la agresión policial».

El fiscal De Lillo remitió el informe al Cuerpo Médico Forense de Neuquén, que ratificó su postura y criticó el trabajo de Creimer. También la defensa de uno de los policías se montó sobre estos cuestionamientos, y amenazó con denunciar a la perito.