2018-08-08
Cuestionan falta de un registro de oposición para la designación del auditor municipal
Compartiendo en un todo lo escrito en el dia de ayer por el vecino Cendra y tambien felicitandolo por su hallazgo respecto a la llamativa "ausencia" de un registro de oposición a la designacion de un nuevo auditor, entendiendolo como un derecho de todo vecino y una obligación de los responsables de la selección del mismo,recurro una vez más a la posibilidad de manifestarme por este medio para dejar expresado mi disconformidad respecto al posible nombramiento del único postulante al cargo de auditor muncipal.
A a mi entender existiría una incongruencia del aspirante para el cargo, generada en incumplir oportunamente con la ordenanza municipal conocida como ATT, hecho que no se atenúa con la intención reciente y contemporánea al concurso,de regularizar dicha infracción.
Mi oposición se motiva en la convicción de poder contar como vecinos con una herramienta importantísima como es la figura de un auditor municipal, quien debe destacarse por ser un funcionario superlativamente impoluto, irreprochable e incuestionable, para tranquilidad de la comunidad y garantía en el cumplimiento de sus obligaciones.
El primer auditor fue cuestionado, entre otras razones ,por ser MEDIATICO, ahora está en manos de los concejales, que esta vez, actúando de acuerdo a las expectativas eviten que el segundo auditor en la historia de Angostura asuma tambien cuestionado.
Por último,recordandolas, comparto unas palabras de Bertrand Russell en Sociedad Humana: Ética y política, quien dijo: "En cada comunidad, incluso en la tripulación de un barco pirata, hay acciones obligadas y acciones prohibidas, acciones loables y acciones reprobables. Un pirata tiene que mostrar valor en el combate y justicia en el reparto del botín; si no lo hace así, no es un ‘buen’ pirata. Cuando uno hombre pertenece a una comunidad más grande, el alcance de sus obligaciones y prohibiciones se hace más grande; siempre hay un código al cual se ha de ajustar bajo pena de deshonra pública.
Alberto Cervantes
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