2021-10-05

La deforestación y el cambio climático

Ante las catástrofes naturales que están ocurriendo en diferentes partes del mundo, como los incendios en Siberia, Grecia y Turquía, las inundaciones en países tan lejanos como Alemania o China, la preocupante sequía del Río Paraná y la cuenca del Plata, el hombre debe trabajar en la recuperación de ciudades y hasta el funcionamiento de centrales hidroeléctricas, con pérdidas económicas enormes y sobre todo la pérdida de vidas. Pero… por qué se producen estos desastres? Podemos evitarlo?

La respuesta absolutamente es SÍ. Todos estos fenómenos tienen un punto en común. Cambio climático, efecto invernadero y deforestación van de la mano.  Y este punto, la Argentina se encuentra lamentablemente dentro del Top 10 de los países con más deforestación en el mundo, según estudios realizados recientemente.

En 2020, cuando la actividad del hombre se detuvo casi por completo, pudimos observar una notable depuración de la atmósfera, el cambio del color de los ríos, la aparición de especies animales casi en extinción, lo que nos reflejó que la Naturaleza seguía trabajando activamente para la purificación del ambiente que todos los seres vivos habitamos, evidenciando la intervención negativa de la actividad del hombre.

Mientras tanto, podemos tomar como ejemplo y aprender de los seres más antiguos del planeta: Los Árboles. 

En los bosques coexisten diferentes especies, que crecen y se desarrollan en forma saludable con una increíble capacidad de adaptación que podemos ver a lo largo del tiempo. Especies casi devastadas que han luchado por permanecer luego de diferentes fenómenos naturales, como la erupción de volcanes, incendios forestales o inundaciones. Pero éstos no pueden sobrevivir ante la inefable acción del Hombre. La tala y deforestación de bosques nativos, tienen consecuencias visibles en plazos muy cortos, debiendo esperar cientos de años para su recuperación (porque a pesar de todo se recuperan una y otra vez!)

Existen en el país diversos programas de recuperación de flora nativa con la ayuda de voluntarios que rescatan brotes y renovales, para introducirlos nuevamente en sus ámbitos naturales con el fin de remediar los errores cometidos, pero mucho más eficiente es evitarlos.

Nuestras regulaciones indican que el hombre necesita “al menos” 15 m2 de espacio verde por persona para tener una vida saludable, y según las estadísticas, en muchos lugares solamente pueden gozar de 0,5 m2. Terrible, no?

Quienes vivimos aquí somos muy afortunados ya que por ahora estamos por encima del promedio aunque si no comenzamos a prevenir en lugar de intentar compensar daños, el desequilibrio se torna inminente.  Por qué nos cuesta tanto tomar conciencia? Por qué es tan difícil sentirnos parte de la Naturaleza?

Sin los bosques con el oxígeno que producen, sin el agua de ríos, lagos y mares, sin el resto de los seres vivos que existen a nuestro alrededor, el Hombre no podría sobrevivir.  Parece ser que es más importante el desarrollo constructivo, comercial y tecnológico, a costa de exterminar lo que realmente nos sostiene como especie.

Para resumir, compartimos algunas de las consecuencias más visibles de la deforestación:

-              Cambio climático: aunque parezca algo muy obvio, el follaje de los árboles produce sombra, filtra rayos UV y equilibra los cambios de temperatura.

-              Aumento de zonas inundables: las hojas y raíces de los árboles absorben el agua y mantienen un equilibrio en épocas de lluvia.

-              Contaminación del ambiente: los árboles absorben gases como el CO2 para transformarlo en O2, necesario para el desarrollo de la vida.

-              Desaparición de hábitats naturales de aves e insectos y biodiversidad: indispensables para mantener sano un ecosistema, sumado a la desaparición de especies arbóreas.

-              Pérdida de Estabilidad del suelo: las raíces de los árboles sostienen el suelo y previenen desprendimientos de tierra.

-              Alteración del ciclo del agua: al perder masas forestales se modifica el comportamiento del agua en la zona, pues esta se desplaza hacia otras partes con vegetación.

 

Los invitamos a tomar conciencia y hacer cada uno su aporte para cuidar nuestro planeta y habitar un mundo más saludable y seguro. Por nuestra generación y las que vendrán. Tenemos la oportunidad de frenar a tiempo. 

Antes de talar un árbol, pensemos todo lo que estamos perdiendo y todo lo que estamos ganando.

Escribió: Valeria Jaliquias para Grupo Árbol VLA

GRUPO ÁRBOL VLA

Nos encontrás en:

Mail: langosturesunbosque.2020@gmail.com

Instagram: Arbol¬¬_vla

Facebook: Arbolvla

Te puede interesar