Un informe de Greenpeace indica que en seis meses el fuego arrasó con 7.700 hectáreas de Bosque
Un informe reciente de Greenpeace ha revelado una alarmante devastación en los Bosques Andino Patagónicos de Argentina, donde incendios forestales han arrasado más de 7.700 hectáreas en tan solo seis meses. Esta superficie quemada equivale a casi la mitad del área de ciudades emblemáticas como Buenos Aires o Bariloche, y el 90% de esta pérdida se concentra en la provincia de Chubut.
El relevamiento de la organización ecologista estima que la superficie afectada por incendios forestales en la región de los Bosques Andino Patagónicos de Argentina durante el período octubre 2023 – marzo 2024 fue de 7.747 hectáreas: en Chubut 6.985 hectáreas, en Río Negro 425 hectáreas, en Neuquén 223 hectáreas y en Santa Cruz 114 hectáreas
La organización ecologista, mediante el procesamiento de imágenes satelitales, detectó el desolador panorama en la región. Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace, ha destacado la urgencia de medidas preventivas y de combate al fuego, señalando que el 95% de los incendios forestales son provocados por actividades humanas.
El informe también subraya la gravedad de los incendios en áreas protegidas como el Parque Nacional Los Alerces y el Parque Nacional Nahuel Huapi, donde se han perdido extensas áreas de bosques en buen estado de conservación. Estos bosques, parte de los pocos remanentes de bosques templados poco alterados a nivel mundial, albergan una biodiversidad invaluable.
Los Bosques Andino Patagónicos enfrentan no solo la amenaza de los incendios, sino también la presión de actividades como el desmonte para urbanizaciones y la introducción de especies exóticas. Datos oficiales indican que entre 2001 y 2022, más de 100.000 hectáreas de estos bosques se perdieron, siendo los incendios la principal causa, especialmente en Chubut.
Giardini advierte que la destrucción continua de los bosques amplifica el cambio climático, la pérdida de especies y el riesgo de eventos extremos como inundaciones y desertificación. Ante esta crisis, Greenpeace insiste en la necesidad urgente de penalizar a quienes sean responsables de estos desastres ambientales.